La caída del cabello puede ser un cambio frustrante en un hombre.  La presencia del pelo es sinónimo de juventud, mientras que la alopecia (calvicie) es característica de la vejez.  Existen medicamentos que previenen la caída del pelo como el finasteride y el minoxidil, sin embargo estos no producen nuevo pelo en pacientes con alopecia significativa.  Afortunadamente ya existe la cura para la calvicie.  Los implantes capilares o implantes de pelo.  Esta nueva modalidad de cirugía promete resultados naturales y permanentes.

Existen dos tipos de cirugía de implantes de cabello.  La primera, es tomar una tira de pelo de la parte posterior de la cabeza.  De esta tira se sacan los pelos de forma individual bajo microscopio y se implantan en la zona de calvicie. Debido a que se toma una tira, queda un defecto en la parte posterior de la cabeza y este hay que suturarlo. Por ende deja una cicatriz como resultado.  Debido a esto, los pacientes a quienes se les realiza esta técnica, no pueden volver a usar su pelo corto (menos de 2 cm) para poder camuflar la cicatriz.

La otra modalidad de cirugía es la que no deja cicatriz en la parte posterior de la cabeza.  En esta cirugía, los pelos de la parte posterior de la cabeza son tomados uno por uno y reimplantados en la parte alopécica.  Con esta técnica, los pacientes quedan sin cicatrices y sin ninguna muestra de que se realizaron cirugía para la calvicie. Además con las técnicas de hoy en día, los resultados naturales son casi garantizados. Dependiendo del grado de alopecia, el paciente puede necesitar uno, dos o mas sesiones para poblar toda la zona.